La Legión de María es una asociación apostólica de laicos católicos que voluntariamente prestan un servicio a la Iglesia. El fin de la Legión de María es dar gloria a Dios a través de la santificación de sus miembros, mediante la oración y la cooperación activa en la evangelización de la Iglesia.

Fue fundada por Frank Duff en Dublín (Irlanda) el 7 de septiembre de 1921.

«La Legión de María representa el verdadero rostro de la Iglesia Católica» (papa san Juan XXIII). Para formar parte de ella solo hay que ser católico y tener el deseo de darse a los demás.

Su espíritu quiere ser el mismo de la Virgen María. Ella es la Reina de los Apóstoles y fue la primera que dio a Cristo al mundo. El pensamiento del fundador era que los seglares se comprometieran en la tarea evangelizadora de la Iglesia unidos a María. 

La oración y el trabajo apostólico son dos pilares importantes. Funciona en pequeños grupos mixtos que se reúnen semanalmente, donde se ora, se comparten experiencias apostólicas, se estudia el carisma de la asociación y otros temas formativos para el bien personal y para hacer más eficaz el apostolado. Los grupos están integrados en las parroquias con el fin de realizar cualquier obra social o de acción católica que considere necesaria el párroco. De manera especial, se trabaja hacia fuera, contactando con familias, enfermos, jóvenes, marginados y excluidos.                         

Su espiritualidad es mariana se inspira en la “Verdadera devoción a la Virgen María” de san Luis María Montfort de Griñón, que tuvo una profunda influencia en el fundador de la Legión, el siervo de Dios Frank Duff. 

En la actualidad, está extendida por todo el mundo, cumpliendo el requisito de aprobación eclesiástica para trabajar en una diócesis o parroquia. A España llegó en el año 1950 a través de una legionaria de Filipinas, Pacita Santos, que estuvo trabajando durante varios años por diversas diócesis.

En el mes de marzo de 2014, el secretario del Pontificio Consejo para los Laicos, emitió el decreto por el que la Legión de María era reconocida por la Santa Sede como “asociación internacional de fieles de derecho pontificio”.